Los creadores de la popular aplicación de mensajería instantánea anuncian sus planes de futuro en una entrevista comparándose con alguno de sus principales rivales.
Los creadores de la popular aplicación de mensajería instantánea WhatsApp han concedido una entrevista a un medio de comunicación español en el que han debatido sobre pasado, presente futuro de WhatsApp. Los planes de futuro de WhatsApp pasan por mantener una línea continuista manteniendo la filosofía que tanto éxito le ha dado hasta la fecha pero que, a su vez, podrían ser los principales puntos flacos debido alaumento del número de competidores.
Si algo funciona, no lo toques
Ese parece ser el máximo anxioma que rige el futuro de WhatsApp. La aplicación ha sufrido un ascenso meteórico desde su lanzamiento debido a su simplicidad de manejo y su ausencia de distracciones de lo que de verdad importa, los mensajes. Por lo tanto, sus creadores esperan que la experiencia de usuario se mantenga igual.
Queremos seguir enviando mensajes. No somos, ni queremos ser, una red social, ni una plataforma de juegos, ni un soporte publicitario
Mantener la simplicidad del servicio es una apuesta a caballo ganador a simple vista, visto los resultados. No obstante existen carencias en WhatsApp que sí están siendo recogidas por sus competidores, y no reaccionar a tiempo puede acabar poniéndoles en apuros.
Ausencia de VoIP en pleno año 2013
La ausencia de soporte VoIP en WhatsApp es un lastre que acabará por pasar factura a la compañía si no reaccionan a tiempo. WhatsApp es ahora mismo la aplicación de mensajería más importante que no permite realizar una llamada de voz o vídeo a nuestros contactos. Cuando estaban prácticamente solos en el mercado era un factor sin importancia, ahora es un handicap que deberían corregir si quieren seguir manteniendo su posición de privilegio.
Por el momento no hay ni rastro de VoIP en el futuro de WhatsApp según se puede desprender de esta entrevista, y ya no hablemos de videollamadas. Los planes de datos móviles cada vez incluyen bonos de datos mayores, factor que nos permite aprovechar más en profundidad este tipo de servicios de los que carece WhatsApp, factor que puede ser determinante a la hora de migrar hacia otro servicio como Google Hangouts.
Una plataforma móvil que se beneficiaría mucho de dar el salto a sobremesa
Sabemos que WhatsApp nació como plataforma de mensajería móvil para acabar con los mensajes SMS. El objetivo ha sido más que cumplido, así que deberían plantearse el seguir creciendo como aplicación en lugar de mantener su actual estatus. El salto al PC no está todavía claro en el futuro de WhatsApp.
No lo hemos decidido aún. Tenemos claro que el PC es una herramienta de comunicación pero no puedo decir nada más al respecto.
Bajo mi punto de vista, el no dar el salto al PC es un error garrafal. Una de las principales ventajas de alternativas a WhatsApp como Line o la propia Google Hangouts es la posibilidad de poder comunicarme desde la comodidad de mi PC con mis contactos, en cualquier lugar. Siempre resultará más cómodo escribir en el teclado de nuestro PC que en el teclado de nuestro teléfono móvil. ¿Porqué no dar esa facilidad a tus usuarios?
Es comprensible una mayor centralización en determinadas plataformas en los comienzos, cuando cuentas con escasos recursos y personal. A estas alturas, con 40 personas en tu equipo y habiendo ya desarrollado para la mayoría de plataformas, no dar el salto al PC es aun más incomprensible.
La privacidad, clave
La privacidad de WhatsApp ha estado en entredicho varias veces debido a la ausencia primero y después debilidad de la encriptación de los mensajes. Los creadores dejan claro en la entrevista que WhatsApp no almacena los mensajes en sus servidores, pero no hay ni rastro de mejoras en la encriptación en el futuro de WhatsApp.
Nosotros no tenemos copia de nada. Una vez que se envía, desaparece. Solo están en nuestro servidor hasta que llega al receptor. Es lógico, nosotros no queremos saber nada de ellos. Ni sus cumpleaños ni sus gustos ni venderles nada. Solo queremos que le llegue el mensaje bien. Tampoco nos interesa lo que envíen porque no hay ningún anuncio relacionado que mostrar.
El hecho de que los mensajes se almacenen solo temporalmente es un punto bastante a favor. Al contrario que otras compañías, WhatsApp no busca hacer negocio con nuestros datos ni hay publicidad en el horizonte futuro de WhatsApp, y esto seguirá siendo así. Una buena noticia para sus usuarios, a pesar de que no haya ni rastro de mejoras en la encriptación.
Una estrechez de miras preocupante a la hora de rentabilizar la compañía
Uno de los principales errores que veo tanto en la actualidad como en el futuro a corto plazo de la compañía es una estrechez de miras a la hora de buscar ingresos incomprensible. Según sus creadores, WhatsApp nunca tendrá publicidad ni comercializará con nuestros datos, dejando caer que otros rivales como Line obtienen sus ingresos por vender nuestros datos personales y convertirnos en «hombres anuncio».
Si lo dan gratis y sin publicidad, no lo harán así para siempre. El coste se paga de alguna manera. La gente ya se ha dado cuenta de lo que vale su privacidad y no quieren ser hombres-anuncio. La clave está en poner un precio que sea atractivo y justo para las dos partes.
Mal, horriblemente mal. Quiero pensar que este ataque gratuito a Line es premeditado buscando atacar un servicio rival con conocimiento de causa y no un simple hablar por hablar. Si algo nos ha enseñado Line es que, al menos por el momento, es perfectamente posible mantener un servicio utilizado por millones de personas de manera gratuita,sustentado con los ingresos procedentes de la venta de añadidos, no prostituyendo nuestros datos personales.
Line se financia con la venta de stickers. Gracias a ello la aplicación no tiene ningún coste para los usuarios, siendo financiada por aquellos que desean tener un valor añadido. Esto, que puede parecer una tontería, puede ser vital en mercados emergentes, donde un dólar puede marcar diferencias.
Un futuro continuista en un mercado cada vez más competitivo
El mercado de la mensajería instantánea es tan dinámico como la electrónica de consumo en general. Tenemos sonados casos, como el de Microsoft Messenger, que demuestran que nadie reina eternamente y que gran parte del secreto está en saberse adaptar a los tiempos que corren. Por el momento a WhatsApp le va bien, pero un exceso de confianza en sus posturas puede acabar pasándoles factura. A tenor de lo visto, el futuro de WhatsApp no pasa precisamente por introducir cambios. Veremos que tal les funciona la estrategia..