Así pues LG anunció en su momento que la pantalla será de 6 pulgadas y la curvatura, al igual que el teléfono de Samsung, será cóncava. Pero no será exactamente igual puesto que el LG G Flex tendrá la curvatura de arriba abajo y el Samsung Galaxy Round la tiene de izquierda a derecha.
No disponemos de más información por el momento, aunque ya sabiendo el precio del smartphone curvo de Samsung no es descabellado pensar que el LG G Flex tenga un precio prohibitivo y al alcance de muy poca gente.
Igualmente también puede ocurrir con su disponibilidad y es posible que lancen modelos limitados para ver como los acoge el mercado de consumo.
Recordemos por ejemplo que el Samsung Galaxy Round tendrá un precio de 1.000 dólares y se pondrán a la venta unidades limitadas tan solo en su país de origen.